Todo lo que tienes que saber sobre el Aumento de Pómulos
El Aumento de Pómulos es una técnica de restauración facial para que hombres y mujeres recuperen el volumen perdido a lo largo de los años.
Los músculos y tejidos de las mejillas tienden a dividirse en dos, aportando un aspecto de cansancio y tristeza en toda la cara.
Con infiltraciones de Ácido Hialurónico, restauramos la parte de pómulos y mejillas a su estado original.
En el caso de los hombres, aumentamos la parte frontal superior de la mejilla, y en el caso de mujeres se tiende a colocar el relleno más en la parte lateral del pómulo para ofrecer una estilización mayor.
Sin embargo, las facciones y proporciones individuales serán el factor que determine dónde inyectar el relleno de Ácido Hialurónico.
Para ello, la técnica propia con cánula desarrollada en la Clínica Vladimir Rovira minimiza riesgos de cortes, morados o hinchazón y nos evita excesivos pinchazos.
Cuándo hacerse un aumento de pómulos
En primer lugar debemos olvidar el antiguo mito del aumento de pómulos artificial, los típicos pómulos con efecto «maléfica».
Hoy en día gracias a los nuevos avances en instrumental médico y sobre todo en productos, más que de aumento de pómulos, debemos hablar de reconstrucción del pómulo.
Además a menudo no realizamos ningún aumento en el volumen, solamente reconstruimos la base debajo del músculo para desplazar tejidos caídos a su lugar de origen, conseguir un elevarlos o incluso tonificarlos sin necesidad de cambiar en absoluto el aspecto del rostro.
Por ello cualquier hombre o mujer es un buen candidato a una reconstrucción de pómulos, incluso unas mejillas bien proporcionadas, pueden requerir de una hidratación o una tonificación para mantener su aspecto.
Lo más importante es identificar las necesidades del paciente y un adecuado diagnóstico médico que valore lo que de realmente es necesario y la obtención de un resultado lo más natural y favorecedor posible.
Cómo se hace un aumento de pómulos
Se lleva a cabo mediante infiltración de rellenos o «fillers».
En la Clínica Vladimir Rovira se suele hacer con cánula y la ejecución consiste en la inyección del relleno en las zonas anatómicas concretas para el resultado deseado.
Se puede infiltrar en el pómulo o en la parte superior de las mejillas (zona de transición debajo del músculo cigomático) para devolver todos los tejidos caídos a su lugar.
Cuánto tiempo dura un aumento de pómulos
Dependerá completamente del tipo de relleno aplicado.
Todavía existen rellenos permanentes, que pueden alcanzar un aumento permanente, pero es desaconsejable debido a posibles deformidades que estos rellenos pueden causar a lo largo de los años y a la imposibilidad de adaptar el implante al proceso de cambio natural inherente al paciente.
Lo más recomendable es recurrir a rellenos reabsorbibles, con una duración que suele oscilar entre los 6 y los 15 meses, aunque lo normal son unos 12 meses.
A pesar de su duración relativamente efímera, que podría «frustrar» a quien busca resultados más a «lago plazo», es importante tener en cuenta que el propio tratamiento estimula el colágeno natural y no solo frena sino que revierte los efectos visibles del envejecimiento fisiológico durante todo el período de reabsorción.
Además estas duraciones acotadas permiten adaptarse a las necesidades del paciente, que pueden variar a lo largo del tiempo.
Cuál es la duración del relleno de pómulos según el producto utilizado
Si se realiza el relleno con inductor de colágeno, tendremos el producto trabajando las profundidades de la piel durante tres meses, y los resultados pueden durar hasta un año.
En comparación con el ácido hialurónico, ambos productos son buenos rellenos para dar volumen pero los inductores de colágeno tienen el efecto doble de acelerar enormemente la producción de colágeno de las células de la piel.
Sin embargo, el precio del inductor de colágeno suele ser más caro que el del Ácido Hialurónico.
Por otro lado, el Ácido Hialurónico es mejor hidratante, por lo cual es un producto exclusivo para zonas como los labios.
La duración de este producto dependerá de su densidad, que tiene que ser la adecuada en cada zona.
Una densidad excesiva puede traer complicaciones como bultos duraderos o hinchazones, mientras que una densidad demasiado baja puede no dar ningún volumen más que una hidratación de la zona inyectada.
La duración de los resultados también dependerá de factores metabólicos individuales, hábitos y cuidados personales.
A continuación detallamos las duraciones medias aproximadas del hialurónico según los casos estudiados en nuestra clínica de Barcelona:
- Pómulos: hasta un año
- Labios: entre 6 y 10 meses
- Nariz: hasta un año y medio
- Mentón: hasta un año y medio
- Código de barras: hasta un año y medio
- Ojeras: hasta un año
Cómo se aplica el producto de aumento de pómulos
En cuanto a la técnica específica puede variar desde la infiltración en lineal, retrotrazado, depósitos…
Todo ello es evaluado por el especialista estudiando las necesidades de cada paciente.
Normalmente se hace sin anestesia complementaria (además de la que viene habitualmente en los propios rellenos), ya que en las profundidades donde trabajamos casi no hay receptores del dolor.
Para aliviar las molestias del paciente, si se produjeran, se puede aplicar frio local u otros métodos tradicionales.
¿Qué es lo mejor para embellecer los pómulos?
Tanto el Ácido Hialurónico como los Inductores de Colágeno cumplen distintas características, mayor o menor «resistencia», «plasticidad» o capacidad de dar volumen, que los hacen el producto perfecto, adaptable a cada paciente y a sus necesidades.
El Ácido Hialurónico aportará mucha hidratación a la zona desde el interior, mientras que los inductores de colágeno trabajarán las células para que produzcan colágeno natural a unos ritmos formidables.
Además de ser productos naturales, propios del organismo y cuya pérdida es la causa en la mayoría de casos del envejecimiento precoz, los procesos actuales de los fabricantes los convierten en un productos de calidad y seguros.
Qué riesgos tiene el aumento de pómulos
Como cualquier proceso médico puede haber riesgos relativos al producto y relativos a la técnica utilizada.
En cuanto a los riesgos relacionados con el producto, en escasos casos puede producirse una reacción alérgica, si se tiene alergia a algunos de los compuestos del relleno.
Sin embargo el Ácido Hialurónico no tiene capacidad alérgica en los tejidos.
En cuanto a la técnica con cánula, minimizamos los riesgos comunes a este tipo de intervención, sangrado, hematomas o hinchazón.
También podría producirse alguna asimetría en la cara ya que la base del propio rostro es asimétrico.
Por último relacionado con el producto y la técnica a la vez, aparición de acumulaciones de producto que se pueden disolver en pocas horas con Hialuronidasa.
Como riesgos más graves y todavía menos habituales están la necrosis o la vasculopatía livedoide derivada de una embolización arterial, debido a la canalización accidental de una arteria.
Por este motivo, la cánula utilizada en nuestro centro sanitario tiene la punta redonda y raramente es capaz de perforar una vena.
A pesar de ello, utilizando una técnica apropiada, realizada en las correctas condiciones de asepsia y con un profesional experto reducimos todos estos riesgos a la mínima expresión.
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Director médico de la Clínica Vladimir Rovira, en Barcelona. Posgrados en Medicina Estética y Envejecimiento Fisiológico, de la Universidad de Barcelona. Médico colegiado por el Colegio oficial de Médicos de Barcelona.
Hola, me puse relleno de pómulos hace unos 6 meses, se puede volver a hacer? Gracias y un saludo
Hola Victoria, sí que se puede volver a hacer, ya que el ácido hialurónico es totalmente compatible consigo mismo. Pasados 15 días ya se aprecia el resultado final y se puede poner otro vial si hace falta un poco mas de volumen.
Hola, es habitual que salgan bultos en la cara con el tratamiento de pómulos?
Me lo hicieron ayer y es como si el producto no se hubiera distribuido bien.
Gracias.
Un saludo.
Los primeros 3 días puede verse hinchado, suele ser agua del propio cuerpo debido a los pinchazos, que suele ir bajando hasta las dos semanas, que se ve el resultado final. Hay que contactar directamente con el especialista que lo ha hecho para evaluar el progreso del tratamiento o aclarar cualquier duda.